En 2002, aunque era madre de una hija que no era suya, Alessandro volvió a cortejarme y logró conquistarme. * Pasé dos años tranquilos con él, que me permitieron olvidar casi toda la fealdad de mi pasado (una de ellas, en particular, he evitado mencionarla aquí, pero fue la que más afectó mi vida). * En 2004, me pidió matrimonio, prometiendo que sería un gran padre para Rebecca, y acepté sin dudarlo. * Hoy, después de tantos años, tengo que admitir que fue un padre maravilloso, incluso si las cosas entre nosotros no volvieron a funcionar. * Alessandro y yo nos separamos en 2009, divorciándonos al año siguiente... y la culpa de ese fracaso fue en gran parte mía. De hecho, aunque lo amaba, lo engañé varias veces durante esos años, esperando que nunca se enterara. Se dio cuenta enseguida, pero al principio fingió que no había pasado nada. Sin embargo, como la situación se prolongó, un día decidió terminar nuestra relación. Rebecca, sin embargo, nunca perdió a su querido padre adoptivo: siempre estuvo presente en la vida de mi hija... y, de hecho, hoy, por motivos de estudio, vive con él en Londres.
Fecha: 17-10-2025 08:06:43
Enviado por:
Futura
Visto: 1164 veces
Añ
caseade 54 comentarios para esta imagen
Leer comentarios
Escribir comentario
Informe falso (FAKE)